A pesar de la lluvia, que esperó la hora de la asamblea para largarse sobre la localidad de Martinez, y cumpliendo el mandato de la asamblea anterior, los trabajadores de IBM empecinadamente comenzaron a salir del moderno edificio para instalarse en el lugar que ya adoptaron como propio: la calle.
Acudieron a la convocatoria del cuerpo de delegados trabajadoras y trabajadores de Martinez, Olivos, Uzal, Vicente Lopez y Catalinas, reuniendose al calor del discurso de los organizadores. Allí, casi un centenar de de informáticos que empiezan a reconocerse como trabajadores, comenzaron a aprender otros oficios: llevar el ritmo con un redoblante de murga, convocar al aplauso con un bombo, enarbolar la bandera del sindicato o simplemente aplaudir. Todo era valido para sacarse el frio bajo la lluvia del conurbano bonarense.
Se informó el avance de la recolección de firmas y por unanimidad se aprobaron los siguientes pasos: Realizar una Asamblea en IBM Olivos el proximo 10 de agosto, y convocar a una nueva cita el jueves 12 para recorrer las calles con las consignas de aumento de salarios y el inicio de paritarias en IBM, para que a nadie le queden dudas de como IBM trata a sus trabajadores.
Con la misma consigna de otras luchas: "si no hay justicia hay escrache" en la tranquila tarde de Martinez se sucedieron discursos convocando a la organización y a dejar de lado miedos y prejucios para ponerse en marcha.
"Somos miles..." y "...el valor agregado de la empresa somos nosotros... somos lo mas valioso" definió Claudio en su encendido discurso que arranco aplausos y hasta un cantito: "IBM de los trabajadores y al que no le gusta, se jode....". Que contraste con la formalidad que años atrás reinaba en esta empresa, quizás el mismo contraste que reina ahora entre los niveles salariales. Los trabajadores saben que son los protagonistas, la fuerza de trabajo en la empresa, pero que a la hora de distribuir las ganancias son actores de reparto. Ahora también comienzan a ser protagonistas reclamando por mas derechos, por los mismos derechos que les son negados detras de métricas y niveles de ganancias impuestas por directores que nada saben de reclamar bajo la lluvia un aumento para llegar a fin de mes. Es hora que se empiecen a enterar, porque la voluntad de los trabajadores de IBM es hacerselos saber. Queda en ellos continuar con esto de ser sordos.
Los trabajadores presentes se comprometieron a recolectar más firmas al petitorio por un aumento salarial y el inicio de paritarias, y a encontrarse nuevamente en la calle, como ya señalamos, el martes en Olivos y el jueves recorriendo con una caravana los alrededores de IBM.
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